lunes, 24 de mayo de 2010

Frases: Ratatouille y la Crítica.

Como ustedes ya saben, soy fan de Tecnoculto, ese blog de todo un poco, escrito por Andrés Borbón a quien guardo respeto como Blogger y escritor; sin embargo, no siempre podemos estar totalmente de acuerdo con las personas que son de nuestro agrado.

El día de ayer, nuestro conocido compatriota escribió un post titulado “Zuckeberg… You Zuck!” que perdió mi agrado desde el mismo título. En dicho post, el escritor critica de forma encarnecida y grosera (esa es la palabra aunque no les agrade) al creador de Facebook.

 

Facebook es una coladera sin arreglo posible en lo que respecta a privacidad, un albañal nauseabundo cuya peste es cada vez más perceptible. Huele a mierda a kilómetros de distancia y, como siempre he dicho: Si no quieres que algo se haga del dominio público en internet… ¡no lo publiques! Si alguna foto puede hacerte pasar una vergüenza, no la subas a Facebook.

No creo que todos estos dimes y diretes sean una campaña para desprestigiar a Facebook, ya que nunca ha tenido ningún prestigio que defender. Lo que pasa es que, en un principio, los usuarios tenían una venda sobre los ojos y ahora hay quienes están dispuestos a ver. Si eres consciente del valor de tu información privada, ándate con pies de plomo cuando uses la red social más famosa del mundo, y la menos ética de todas.

Andrés Borbón. Tecnoculto. (clic aquí para el original)

Más allá de estar de acuerdo o no con las críticas, me molesta demasiado la innecesaria falta de respeto con la que la realiza. Esta crítica meramente DESTRUCTIVA me ha traído inmediatamente a la cabeza las más sabias palabras que he escuchado acerca de la crítica y que, para mi sorpresa, las vine a aprender de una película animada.

 

SPOILER ALERT!!

 

Al final de la culinaria película, Anton Ego, un durísimo crítico de comida, acepta, al final, la verdad detrás del su labor.

 

La vida de un crítico es sencilla en muchos aspectos, arriesgamos poco, y tenemos poder sobre aquellos que ofrecen su trabajo y su servicio a nuestro juicio, prosperamos con las críticas negativas, divertidas de escribir y de leer; pero la triste verdad que debemos afrontar, es que en el gran orden de las cosas, cualquier basura, tiene más significado que lo que deja ver nuestra crítica.

Pero en ocasiones el crítico sí se arriesga cada vez que descubre y defiende algo nuevo. El mundo suele ser cruel con el nuevo talento, las nuevas creaciones, lo nuevo, necesita amigos. Anoche, experimente algo nuevo, una extraordinaria cena de una fuente singular e inesperada. Decir solo que la comida y su creador han desafiado mis prejuicios sobre la buena cocina, subestimaría la realidad. Me han tocado en lo más profundo.

En el pasado, jamás oculte mi desdén por el famoso lema del Chef Gusteau “Cualquiera puede cocinar”, pero al fin me doy cuenta de lo que quiso decir en realidad, no cualquiera puede convertirse en un gran artista, pero un gran artista puede provenir de cualquier lado.

Es difícil imaginar un origen más humilde que el del genio que ahora cocina en el restaurante Gusteau, y quién, en opinión de este crítico, es nada menos que el mejor Chef de Francia… pronto volveré a Gusteau hambriento.

La película es encantadora, la adoro, pero estas palabras no solamente son hermosas, son la verdadera realidad de los críticos y, si la película fuera un churro, tan sólo por este maravilloso discurso de Anton Ego, valdría la pena verla.

No agregaré más, se los dejo a su criterio.

2 críticas:

Colette dijo...

La verdad creo que es ingenuo esperar que algo que uno publique en internet, en donde sea que lo publique, sea facebook, twitter, blogger, etc., no será utilizado para la comercialización. Finalmente, este es un mundo capitalista, y facebook es gratis por una razón: publicidad. Yo no tengo ningún problema con que facebook tome la información que yo proporciono en mi perfil para enfocar cierto tipo de publicidad a mi persona, finalmente facebook es una empresa, y como empresa buscará generar ingresos.

Lo que se debe propiciar es una cultura en la que el usuario esté consciente de lo que publica en internet. Que si no quiere que se sepa algo, no lo publique y punto. Que no estén esperando que otros defiendan lo que en primer lugar uno debe defender.

Colette dijo...

Ah, por cierto, AMO Ratatouille. La historia, ¡los gráficos! Maravillosa.