lunes, 9 de febrero de 2009

El extraño… (El pasado)


“El Paraíso” de Jan Bruegel



-Bienvenido…



Sin saber exactamente como tomar aquella situación, seguí mi camino hacia el interior de la habitación sin responder, examiné todo el cuarto, sábanas blancas que sobresalían cerca de la cabecera de la cama matrimonial que a su vez tenía un cobertor azul cielo que combinaba en cierta forma con la lámpara que estaba sobre una pequeña cajonera. Sobre una de las blancas paredes de esa habitación una réplica de la pintura “El Paraíso” de Jan Bruegel.



Volví la mirada a aquella misteriosa mujer… desde que entré sólo se había quedado observando cada uno de mis pasos dentro de la habitación y ahora me miraba fijamente a los ojos, era difícil tratar de evadir esos ojos, realmente me sentía demasiado intimidado por ella.



-¿No me recuerdas?
-Creo que me confunde señorita.
-¿Qué clase de mujer sería yo si decidiera quedarme en la misma habitación de un desconocido?
-Créame que en todos mis años de viaje he conocido toda clase de mujeres, nada me extraña en estos días.
-¿En realidad has olvidado quién eres cierto?
-Nunca, casi cinco años han pasado desde que comencé esta travesía sin rumbo fijo tratando de olvidar el pasado y si continúo deambulando es precisamente por que no he sido capaz de olvidar una sola de las sílabas que se pronunciaron entonces.
-¿Entonces por qué no me reconoces? ¿Has olvidado a quien estuvo contigo todo este tiempo que no lograste olvidarla?
-¿Olvidarla? ¿A quién se refiere?
-Tu sabes exactamente a quien me refiero, acaso quieres que haga temblar nuevamente tu espíritu pronunciando su nombre?
-No! Deténgase, debo irme, dormiré en otro lugar…
-Aun cuando así lo quisieras, la tormenta ha comenzado y las calles de esta ciudad son muy peligrosas.
-Hace muchos años que me ha dejado de importar mi seguridad.



Salí corriendo de la habitación, asustado, con un sentimiento extraño en mi pecho, nuevamente sentía ese fuego quemándome por dentro; sin embargo… –no, ella no puede conocerme…



Estaba por llegar a las escaleras cuando repentinamente escuché la voz de la mujer gritando mi nombre. Inmediatamente me quedé congelado, no pude dar un paso más, un escalofrío recorrió mi cuerpo desde los dedos de mis pies hasta la punta del más largo de mis cabellos… –Ella me conoce. Lleno de asombro, con la mirada congelada, las pupilas dilatadas y una posición corporal más bien parecida a la de un soldado al recibir la orden de “firmes”, un cuerpo que en el exterior parecía congelado por dentro era un mar de emociones, de conflictos, explosiones inconcebibles ocurrían en cada una de mis células en aquel instante, con la fuerza de todas las oleadas juntas de los océanos en la tierra.



Como quien se resigna a su destino final, tal como el condenado camina sin oponer resistencia alguna al paredón, tal como las gotas de agua se dejan llevar por la gravedad en la lluvia; así, caminé lentamente de regreso a la habitación, entré al cuarto, mientras aquella mujer me seguía observando pero esta vez con una mirada más compasiva, con la mirada hacia abajo, cosa demasiado rara en mí, avancé y me desvanecí totalmente en la cama, desmayé, con la vana esperanza de que todo volviera a la normalidad al despertar.



-Nunca ha funcionado ¿cierto? El pasado no se va con cerrar los ojos, ya deberías haber entendido eso hace mucho tiempo, sin embargo, tu y yo sabemos que eso no es posible para nosotros.



Con los ojos aun cerrados, esa fue la frase que escuché al despertar, mi reloj advertía que habrían pasado algunas horas desde que volví a la habitación, sin embargo, aún continuaba la tormenta…



-¿Has olvidado a tu pequeña hermana cierto?



Continuará…

2 críticas:

♫ ::Lü::♪ dijo...

chale creo que mi paranoia me está llevando a otro extremo, al principio cuando comencé a leer esto creí que lo habias escrito para... y la verdad ya estaba dispuesta a reclamarte jajaja

te amo!

me gusta como escribes pollis!

Anónimo dijo...

La historia es buenisima!!! Todo el que entre a este blog le recomiendo que siga esta historia. Isma que buen escritor eres :)